5 razones para hacer prácticas en el instituto

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Es sabido que un programa de prácticas durante y después de la universidad es una parte esencial de la mayoría de las carreras. Las prácticas te dan la experiencia que necesitas para empezar a trabajar en un empleo remunerado durante y después de la universidad. Te permiten acumular los años de "experiencia laboral previa" que exigen muchas carreras antes incluso de obtener tu título. Sin embargo, ¿sabías que también puedes (y debes) hacer prácticas en el instituto?

Por supuesto, estas prácticas no caerán simplemente en tus manos, sino que tendrás que trabajar para obtenerlas. Tendrás que demostrar que tienes las cualidades necesarias para ser un buen becario y para ayudar a la persona con la que hagas las prácticas. Consulta con tu centro de estudios para ver si tienen alguna idea de prácticas que tenga que ver con la carrera que esperas seguir. También puedes llamar tú mismo para ver si alguna empresa te contrataría como becario no remunerado.

A veces los estudiantes de secundaria evitan las prácticas, ya que no suelen recibir un salario, y en su lugar dedican su tiempo a un trabajo común en el instituto, como ser camarero o trabajar de cajero. Esto es completamente comprensible, y a menudo inevitable, ya que muchos estudiantes necesitan dinero para ahorrar para un coche o para los gastos de la universidad. Sin embargo, es importante al menos tener en cuenta los muchos beneficios de las prácticas y considerar la posibilidad de aligerar un poco el horario de trabajo para dejar espacio a los inconmensurables beneficios de las prácticas.

  1. ¡Solicitudes universitarias! Las universidades potenciales se alegrarán de ver que te has esforzado por adquirir experiencia para tus futuros objetivos profesionales incluso antes de entrar en la universidad. La mayoría de los estudiantes de secundaria no realizan prácticas, por lo que destacarás en las universidades sólo por haberlas realizado.
  2. Comprueba qué campos profesionales te interesan. Las prácticas te permiten probar diferentes campos profesionales incluso antes de declarar tu especialidad. Si te interesa ser veterinario, llama a la clínica veterinaria de tu mascota y pregunta por las oportunidades de prácticas no remuneradas. Si te interesan los negocios, llama a un amigo de la familia que sea agente de seguros y pregúntale si necesita un poco de ayuda extra durante el verano. Aprovecha las oportunidades de prácticas para descartar campos profesionales que antes te atraían, pero que te diste cuenta de que en realidad no te interesaban una vez que adquiriste experiencia práctica en esa profesión.
  3. ¡Haz una red de contactos! Las prácticas son una forma maravillosa de promocionarse en su campo profesional antes incluso de entrar en la universidad. La creación de redes es una de las principales funciones de las prácticas, así que ¿por qué no empezar a conocer a las personas adecuadas antes incluso de llegar a la universidad? Nunca se sabe qué conversación te llevará a la universidad de tus sueños, a una gran beca o incluso a más oportunidades de prácticas.
  4. Construye tu currículum. Trabajar en un local de comida rápida no animará a futuros empleadores a contratarte, pero ayudar en una empresa de diseño gráfico sí. Considera el efecto de recibir dinero por un trabajo remunerado en la escuela secundaria frente a recibir una experiencia inestimable al hacer prácticas.
  5. Aprende el profesionalismo en el lugar de trabajo. Las habilidades de comunicación, trabajo en equipo y liderazgo que utilizas en un entorno profesional son muy diferentes de las que utilizas con tus compañeros. Vas a trabajar con muchos tipos diferentes de personas durante el resto de tu vida, y las prácticas son una buena manera de aprender a comunicarte con todos ellos.